La Junta Médica de Kenia ordenó a la ONG británica Marie Stopes, que suspendiese todos los servicios de aborto en el país, donde esta práctica esta prohibida salvo si la salud y vida de la madre está en riesgo, según informaron hoy medios locales.
La suspensión procede de un comité organizado por la Junta de Médicos y Dentistas de Kenia (KMPDB) que investiga las acusaciones de que esta ONG estaba ofreciendo servicios de aborto en algunas de las 22 clínicas que tiene en el país.
Los testigos que participaron en dicho comité acusaron a la organización de ofrecer abortos previo pago de unos 50 dólares (unos 44 euros).
La Constitución de Kenia defiende en su artículo 26 «el derecho a la vida» desde la concepción y determina que el «aborto no está permitido salvo que, en la opinión de un experto médico, haya necesidad de un tratamiento de emergencia o la vida o la salud de la madre esté en peligro».
Además, se han producido varias redadas en los centros de salud y planificación familiar de esta ONG durante las últimas semanas, en los que la Policía encontró a casi medio centenar de menores haciendo cola para recibir tratamientos contraceptivos, indicó el diario local Daily Nation.
La presidenta de Marie Stopes en Kenia, Hezron McObewa, explicó frente al comité que comenzaron una campaña de salud sexual y derechos reproductivos el pasado agosto que estaba consensuada con el Consorcio de Salud Reproductiva.
Marie Stopes explicó ante el comité que al 99 % de las personas que llaman a su número gratuito de atención se le aconseja no practicar el aborto, y que en torno a un 1 % deciden interrumpir su embarazo

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• Promoción, divulgación y defensa de los valores, derechos y deberes de la familia y de la vida humana.